La fisioterapia invasiva es una rama avanzada de la fisioterapia que utiliza técnicas y procedimientos que requieren la penetración de la piel para tratar diversas afecciones musculoesqueléticas y neuromusculares. Estas técnicas, realizadas por fisioterapeutas especialmente formados, incluyen la punción seca, la electrólisis percutánea intratisular (EPI) y otros procedimientos guiados por ecografía.
Objetivos de la Fisioterapia Invasiva
- Aliviar el Dolor: Reducir el dolor agudo y crónico mediante la intervención directa en los tejidos afectados.
- Mejorar la Función: Restaurar y mejorar la función de músculos, tendones y ligamentos dañados.
- Promover la Regeneración de Tejidos: Estimular la reparación y regeneración de tejidos mediante técnicas específicas.
- Reducir la Inflamación: Disminuir la inflamación en los tejidos afectados, facilitando el proceso de curación.
Técnicas Comunes en Fisioterapia Invasiva
- Punción Seca: Utilización de agujas finas para tratar puntos gatillo miofasciales, con el objetivo de liberar la tensión muscular y reducir el dolor. La punción seca puede ser superficial o profunda, dependiendo de la localización del punto gatillo.
- Electrólisis Percutánea Intratisular (EPI): Técnica que utiliza una corriente galvánica a través de una aguja para producir una reacción inflamatoria controlada que promueve la regeneración de tejidos dañados, como tendones y ligamentos.
- Neuro modulación Percutánea: Inserción de agujas con estimulación eléctrica para modular la actividad nerviosa y aliviar el dolor neuropático.
- Mesoterapia: Inyección de pequeñas dosis de medicamentos antiinflamatorios y analgésicos directamente en el área afectada para reducir el dolor y la inflamación.
- Ecografía Musculoesquelética: Utilización de ultrasonido para guiar procedimientos invasivos, asegurando precisión y seguridad en la intervención.
Indicaciones para la Fisioterapia Invasiva
Lesiones Deportivas: Tratamiento de lesiones agudas y crónicas en atletas, como tendinitis, fascitis plantar y desgarros musculares.
Dolor Miofascial: Tratamiento de puntos gatillo en músculos y fascias que causan dolor referido y disfunción.
Tendinopatías: Tratamiento de afecciones tendinosas crónicas, como la tendinitis rotuliana, tendinitis de Aquiles y epicondilitis.
Lesiones Ligamentarias: Intervención en lesiones de ligamentos para mejorar la cicatrización y la función.
Dolor Crónico: Tratamiento del dolor crónico no específico, como el dolor lumbar o cervical crónico.
Beneficios de la Fisioterapia Invasiva
Alivio Rápido del Dolor: Las técnicas invasivas pueden proporcionar un alivio más rápido y efectivo del dolor comparado con los tratamientos no invasivos.
Precisión en el Tratamiento: La guía ecográfica permite una mayor precisión en la localización y tratamiento de las estructuras afectadas.
Estimulación de la Regeneración: Promueve la regeneración y reparación de tejidos dañados, mejorando la recuperación funcional.
Menor Necesidad de Medicación: Disminuye la dependencia de medicamentos analgésicos y antiinflamatorios.
Minimización de Complicaciones: Comparada con intervenciones quirúrgicas, la fisioterapia invasiva presenta menos riesgos y complicaciones.
Modalidades de Tratamiento
Sesiones Individualizadas: Basadas en una evaluación detallada y en las necesidades específicas del paciente, cada sesión es adaptada para maximizar los beneficios.
Protocolos Guiados por Ecografía: Utilización de ultrasonido para guiar y monitorear las intervenciones, asegurando precisión y efectividad.
Programas de Rehabilitación Combinada: Integración de técnicas invasivas con métodos tradicionales de fisioterapia para un enfoque de tratamiento integral.
La fisioterapia invasiva representa un avance significativo en el tratamiento de diversas afecciones musculoesqueléticas y neuromusculares. Con un enfoque basado en la evidencia y técnicas avanzadas, ofrece a los pacientes una opción efectiva para el manejo del dolor y la recuperación funcional